Alimentación correcta en el adulto y adulto mayor:

Alimentación correcta:

La alimentación correcta en adultos y adultos mayores se refiere a consumir una dieta equilibrada y variada que proporcione los nutrientes necesarios para mantener la salud y prevenir enfermedades relacionadas con la dieta. Una alimentación adecuada implica consumir una variedad de alimentos nutritivos, controlar las porciones, mantenerse hidratado y adaptar la dieta a las necesidades individuales, con el objetivo de promover la salud y el bienestar.

Problemas de salud que ocasiona la mala alimentación en el adulto y adulto mayor:

• Debilidad del sistema inmunitario que aumenta el riesgo de infecciones.
• Mala cicatrización de heridas. 
• Debilidad muscular y menos masa ósea que pueden llevar a caídas y fracturas.
• Mayor riesgo de muerte.

Además, la desnutrición puede conducir a un mayor desinterés por la comida o a la falta de apetito, lo cual sólo empeora el problema.

Enfermedades que puede ocasionar la mala alimentación:

• Diabetes mellitus. 
• Hipertensión arterial. 
• Enfermedades del corazón. 
• Cáncer. 
• Osteoporosis.

Recomendaciones:

1. Incluir por lo menos un alimento de cada grupo en cada una de las tres comidas principales del día (desayuno, comida y cena).
2. Comer la mayor variedad posible de alimentos: abundantes verduras y frutas.
3. Suficientes cereales de preferencia integrales (tortillas, pan, pastas, arroz).
4. Pocos alimentos de origen animal sin grasa (leche, huevo, carne, pescado).
5. Consumir lo menos posible de grasas, aceites, azúcares y sal.
6. Beber agua natural (mínimo litro y medio al día).
7. Procurar la máxima higiene al almacenar, preparar y consumir los alimentos.
8. Realizar 30 minutos de actividad física al día.
9. Comer con tranquilidad, en compañía de preferencia en familia y disfrutar de su alimentación.

Factores que afectan el estado nutricional:

• Factores fisiológicos en adultos mayores incluyen la disminución del metabolismo basal, cambios en el metabolismo de carbohidratos, cambios en la composición corporal, interacciones medicamentosas, y la reducción de los requerimientos energéticos con la edad. 
• Los factores alimenticios se relacionan con la posible restricción en frutas y verduras frescas, por lo que a menudo se necesitan suplementos vitamínicos y minerales para mejorar la inmunidad y prevenir infecciones en adultos mayores. 
• Los factores psicosociales abarcan la pobreza, limitaciones de recursos, malos hábitos alimentarios, estilos de vida, soledad, depresión y anorexia. 
• Los factores ambientales hacen que la detección de problemas nutricionales en adultos mayores sea compleja, ya que muchos no asisten a citas médicas, lo que puede incrementar los problemas nutricionales con el tiempo.

Acciones enfermería en promoción, prevención y educación:

• Consume: Alimentos que benefician a tu salud como frijoles, lentejas, habas, avena, maíz entero y arroz integra, pescado, aguacate, pepitas, cítricos y frutas de temporada.  
• Evitar: Carne rojas, jamón, salchichas alimentos fritos o comida chatarra y empaquetada.
• Elige: Tomar de cinco a siete vasos de agua simple al día y evitar los refrescos o jugos azucarados.
• Recuerda: Tomar tus medicamentos de acuerdo a las indicaciones de tu médico.
• Actívate: Durante 30 minutos al día puedes bailar o caminar.

Norma oficial:

Estadísticas a nivel mundial:

A escala nacional, menos de 2% de los adultos mayores en México padece desnutrición. El grupo de edad más afectado es el mayor de 80 años con cifras de 4% en hombres y casi 5% en mujeres. Hasta 64% de los hombres y 74% de las mujeres sufren sobrepeso u obesidad.

Las mujeres tienen una prevalencia de 15 puntos porcentuales mayor de obesidad que los hombres. La prevalencia de anemia fue mayor en las mujeres que en los hombres (34.8 contra 17%).